Ser papá y mamá es una tarea en constante aprendizaje, donde los errores y aciertos están presentes en el día a día. En cada momento se está transmitiendo a los hijos conocimientos, hábitos, actitudes, aptitudes, experiencias, valores, etc. En el quehacer diario no se puede bajar la guardia pues todo minuto cuenta en la formación del niño y la niña.